top of page
Buscar

HIStory Part II: His story, His Legacy

  • Foto del escritor: Soldier Of Love
    Soldier Of Love
  • 24 sept
  • 7 Min. de lectura

Confesión y batalla


Si el álbum HIStory fue una confesión susurrada al mundo, la gira se transformó en un campo de batalla, donde Michael no luchó con armas, sino con ritmo, luz y amor. El escenario ya no era solo un lugar para cantar y bailar, sino que se convirtió en el espacio donde reivindicaba su voz, su luz y su historia.


ree

Desde aquel primer paso en el coloso de Praga, con su traje dorado brillando como un sol propio, cada concierto fue más que un espectáculo: fue resistencia, amor y entrega. Una declaración de que, pese a las heridas, seguía siendo el Rey, no por un título, sino por la fuerza con la que tocaba las almas de su público.


Pero detrás del telón la realidad era distinta: su salud, el juicio constante de los medios y el peso de las expectativas lo acompañaban en silencio. Y aun así, noche tras noche, volvía a levantarse, convencido de que la música podía sanar y llevar luz a un mundo que tanto lo necesitaba.


ree


Una campaña monumental


Antes de que el álbum naciera, Michael soñaba con algo más grande que la música: quería sentirse como un fenómeno mundial. Así nació una campaña publicitaria de 30 millones de dólares, una cifra nunca vista para un disco.


La portada del album ya respiraba grandeza: Michael convertido en estatua imponente, con el traje de Jam y la pose con la que abría los conciertos del Dangerous Tour. Inspirado en esa imagen, mandó construir seis esculturas de casi diez metros que recorrieron Europa como heraldos de su regreso.


ree

Y en 1994, el golpe maestro: en Budapest grabó un cortometraje en el que aparecía como un emperador recibido entre lágrimas y gritos de amor. Una escena imposible de olvidar, que encendió la expectativa antes del lanzamiento mundial de HIStory.


ree


Lanzamiento y controversias


El 15 de junio de 1995, las tiendas del mundo entero vibraron: el Rey del Pop estaba de regreso. Los fans con el corazón desbordado recibieron HIStory con fascinación, pero la crítica no tardó en aparecer.


Más que ningún otro, este fue el álbum más cuestionado de su carrera. Desde la energía combativa de Scream hasta la oscuridad de los nuevos temas, muchos lo compararon desfavorablemente con sus discos pasados.

La polémica estalló con They Don’t Care About Us: frases interpretadas como ofensivas desataron acusaciones de antisemitismo, que Michael negó con firmeza, pidiendo disculpas y censurando las palabras en futuras ediciones.


A pesar de debutar en el número uno, las ventas en Estados Unidos no alcanzaron lo esperado. Y lo que para cualquier otro artista hubiera sido un triunfo; para Michael, que había conquistado el mundo con Thriller, se sintió como un estancamiento.


ree


Luces y sombras en la promoción


Con su reputación golpeada y la prensa en su contra, Michael apostó por la televisión como la mejor forma de promocionar HIStory, decidido a evitar a toda costa una nueva gira tras el desgaste físico y emocional del Dangerous Tour.

Pero las cosas no salieron como esperaba.


El 14 de junio de 1995, apenas un día antes del lanzamiento del álbum, apareció junto a Lisa Marie Presley en una entrevista con Diane Sawyer. Lo que debía ser un gesto de honestidad terminó convirtiéndose en un momento incómodo, marcado por preguntas cargadas de crítica y negatividad.


ree

Aun así, esas apariciones en televisión también dejaron momentos de luz. En los VH1 Awards, Boyz II Men le rindieron homenaje y Michael se unió a ellos en el escenario.

También fue pionero en uno de los primeros chats en vivo por internet, creando una nueva forma de conectar con sus fans.

Y, más inolvidable que todo lo demás, estuvo la apertura de los MTV Video Music Awards de 1995, donde presentó un popurrí de quince minutos que se convirtió en un momento definitorio de la historia de la televisión.


ree


One Night Only y el paso a la inevitable gira


Michael siguió apareciendo en distintos escenarios, pero su gran apuesta era un concierto especial en diciembre de 1995: One Night Only, que, junto al legendario mimo Marcel Marceau, se preparaba para ser un espectáculo inolvidable. Sin embargo, el destino jugó en su contra.


El estrés y una fuerte deshidratación lo hicieron colapsar durante los ensayos, lo que obligó a cancelar el concierto y lo dejó hospitalizado durante varios días. El incidente casi terminó en tragedia, pero la prensa, ansiosa por manchar su imagen, sugirió cruelmente que todo había sido fingido, una narrativa que dañó las ventas del álbum en la crucial temporada navideña.


ree

Ante esta hostilidad, Michael decidió entonces tomar otro rumbo, y concentrar su campaña fuera de los EEUU.  

En 1996 brilló en los BRIT Awards con un épico Earth Song, y poco después en los World Music Awards de Mónaco, con otra interpretación memorable. 


Pero pronto sucedió lo que él más temía, la millonaria campaña de promoción no daba los resultados esperados y la discográfica Sony exigió lo que él más quería evitar… una gira mundial.


La gira mundial


Aunque al inicio Michael recibió la noticia con incomodidad, finalmente aceptó volver a los escenarios. No fue solo por presión, sino también por la necesidad de cerrar el vacío que había dejado la abrupta cancelación de su Dangerous Tour.

Así nació el HIStory Tour, un acto de reconciliación con el escenario.



ree

Tras perder el patrocinio de Pepsi, contó con el apoyo financiero del príncipe árabe Al-Waleed.

Fiel a su esencia, Michael supervisó cada detalle: repertorio, visuales, vestuario y escenografía.

El traje dorado se convirtió en el emblema de un show monumental, un viaje por sus clásicos y sus nuevas canciones, coronado con himnos de esperanza como Earth Song y Heal the World.


El 7 de septiembre de 1996, en Praga, inició la travesía ante 125.000 personas.

Fue el comienzo de más de 80 conciertos en Europa, Asia, Oceanía, África y América.

Lo que nadie imaginaba era que aquella sería su última gira.


ree


Complicaciones


Aunque en la superficie todo brillaba, detrás del escenario la realidad era más frágil. Michael enfrentaba dos grandes desafíos: su salud y las exigencias de una producción colosal.


Su voz comenzaba a resentirse y los episodios de laringitis, cada vez más frecuentes, lo obligaron a usar playback en gran parte del show, lo que generó desafortunadas críticas, a mi parecer, muy injustas, ya que no consideraban el esfuerzo sobrehumano que implicaba bailar y cantar con semejante intensidad durante dos horas.


ree

La producción, tan ambiciosa como grandiosa, también sufrió sus fallas: errores técnicos, de mezcla y fallos escenográficos acompañaron la gira desde el inicio. A esto se sumó un distanciamiento con parte del público en Estados Unidos, donde solo actuó dos veces en Hawái, debido a las cifras de ventas en el país.


En lo personal, tampoco atravesaba su mejor momento, pues arrastraba problemas de salud, soportaba la presión mediática y cargaba con el dolor de su divorcio con Lisa Marie Presley. Sin embargo, noche tras noche, se entregaba al escenario con todas las fuerzas que le quedaban.


Una nueva luz


En medio de todo, Michael aún encontró tiempo para crear. Dio vida al mediometraje Ghosts, que con atmósfera fantasmagórica servía como metáfora de cómo se sentía juzgado por el mundo. Y poco después lanzó Blood on the Dance Floor, que le dió un nuevo impulso a la gira.



ree

Pero más allá de la música, lo que realmente iluminó esa etapa fue el nacimiento de su primer hijo, Prince, en 1997.

Ser padre le devolvió fuerzas y esperanza, aunque siempre fue un artista entregado, en esos meses brillaba una luz distinta en sus ojos, la alegría íntima de quien había encontrado una razón más para sonreír y seguir adelante.

Ya no cantaba solo para el mundo, también lo hacía para su hijo. Y esa chispa convirtió cada presentación en un acto de puro amor.


ree


La calma en la tormenta


Contra todo pronóstico, el HIStory Tour recaudó más de 170 millones de dólares, convirtiéndose en la gira más exitosa de los noventa. Pero más allá de las cifras, lo que quedaba era el mensaje: un acto de poder, de resistencia y de esperanza tras los años más oscuros del Rey del Pop.


ree

A pesar de la imagen que los medios insistían en difundir, en cada país que visitaba, su llegada se vivía como un acontecimiento nacional.

Y más allá de la música, incluso con el corazón roto, Michael seguía mostrando su generosidad:

visitaba hospitales, abrazaba a los niños y llevaba consuelo a los más vulnerables.

Guardaba su dolor en silencio, pero aun así elegía sanar a los demás con amor.



ree

Así, aunque en Estados Unidos el recibimiento fue más frío, HIStory se convirtió en un triunfo global, vendiendo más de 16 millones de copias y consolidándose como el álbum doble más vendido de la historia.


HIStory concluye


Treinta años después, HIStory sigue siendo mucho más que un álbum: es el retrato de una de las etapas más duras de Michael Jackson y, al mismo tiempo, la prueba de que el dolor puede transformarse en arte eterno.


ree

Lo que comenzó como una confesión se transformó en un campo de batalla, y lo que nació en la lucha se convirtió en un espejo. En él, Michael nos mostró sus heridas, su esperanza, su humanidad y, al hacerlo, nos invitó a mirar dentro de nuestro propio reflejo.


Y aunque a menudo pudiera parecer que estaba solo en medio de la tormenta, el amor nunca le faltó. En los créditos del álbum, dedicó HIStory a Elizabeth Taylor, a los niños, a sus fans, a su familia y a sus amigos más cercanos, mostrando que su cariño y apoyo lo sostuvieron en sus momentos más oscuros.


A través de su música y de su monumental gira, Michael nos recordó que incluso “cuando haya nubes en el cielo, podrás seguir adelante, si tan solo sonríes”.

Y con esa sonrisa dejó al mundo no solo su historia, sino también el valor de creer en la esperanza.


Con todo mi corazón,

Daniela 🌻


Gracias Michael, por tu sonrisa eterna.
Gracias Michael, por tu sonrisa eterna.

Una dedicatoria especial a mi querida amiga Ilaria, cuya bondad y corazón generoso me ayudaron a traducir estas palabras al italiano, me guiaron en la escritura y me acompañaron siempre con su constante presencia. Gracias, amiga mía, por estar siempre a mi lado.


Y a ti, querido lector, gracias por tu paciencia, por permanecer aquí incluso cuando esta parte tardó más en llegar. Tu presencia, tu tiempo y tu cariño significan para mí más de lo que jamás podría expresar.

 
 
 

Entradas recientes

Ver todo

Comentarios


bottom of page